La berlina ‘premium’ dispone de eje trasero direccional, suspensión neumática activa y avanzados sistemas de seguridad.
Mercedes está dando los últimos retoques a su nuevo Clase S, que se presentará de manera oficial en septiembre, y poco a poco ofrecen información del modelo. En esta ocasión la marca alemana ha querido desgranar algunas de sus innovaciones tecnológicas, que inciden directamente tanto en la seguridad como en su comportamiento.
El elemento más destacado de su nueva dotación, aunque es opcional, es el tren de rodaje activo E-ACTIVE BODY CONTROL. Cuenta con un sistema eléctrico de 48 voltios y con unidades de control que analizan un millar de veces por segundo la situación del vehículo, adaptando en consecuencia la respuesta de los muelles y amortiguadores para responder ante cada irregularidad del asfalto y así ofrecer un mayor nivel de confort y seguridad.
No sólo eso, este sistema es importante porque habilita la nueva función Pre-SAFE Impulse Side. Cuando el coche detecta que se va a producir un impacto lateral, en tan solo unas décimas de segundo eleva la carrocería ligeramente (hasta 80 milímetros), haciendo que sea el umbral de la puerta, más resistente que ésta, el que reciba la mayor parte del golpe, reduciendo la deformación sufrida por el habitáculo y las posibles lesiones de los ocupantes.
“Si los sensores detectan un choque lateral inminente, el sistema interviene elevando de forma preventiva la carrocería hasta ocho centímetros con ayuda de E-ACTIVE BODY CONTROL. De este modo, el impacto se produce en las estructuras especialmente resistentes situadas en la parte inferior del vehículo”, señala Michael Hafner, responsable de Conducción Automatizada de la marca alemana.
En segundo lugar, puede montar un eje trasero direccional que ayuda a mejorar tanto su estabilidad como agilidad, algo clave en un modelo de este tamaño. Se puede elegir entre dos versiones, una con un ángulo de giro máximo de 4,5 grados y otra de 10 grados, consiguiendo reducir el diámetro de giro hasta en dos metros para quedarse en solo 11.
A esto se suma un paquete de asistencia a la conducción mejorado, con funciones como el asistente activo de dirección o el control activo de ángulo muerto; y el sistema de aparcamiento con ayuda activa y, de manera opcional, con cámara de 360 grados, lo que permite tener un mayor control sobre lo que rodea al vehículo.
Fuente: https://motor.elpais.com/actualidad/el-nuevo-mercedes-clase-s-llegara-cargado-de-tecnologia/